Gila y la guerra

Como ya sabéis, este humorista -seguramente el mejor del siglo pasado- puede burlarse de la guerra y demostrar su absurdidad porque participó activamente en ella.
Con sus 17 años y su idelogía comunista en bandolera (militaba en las Juventudes Socialistas Unificadas) combatió contra los rebeldes. Esto le costó un fusilamiento del que se salvó por la alta concentración de resveratrol en disolución alcohólica de sus verdugos moros.
Después vinieron los campos de prisioneros, las cárceles, la miseria, etc.
Gila para siempre.